Queremos compartir con ustedes la extraordinaria velada que vivimos en Casa Emberwood el pasado 18 de enero. Fue una noche llena de risas, conexiones significativas y generosidad desbordante.
Desde la deliciosa cena que deleitó nuestros paladares hasta la emocionante subasta, cada momento fue tejido con amor y compromiso. Vimos cómo la magia de la solidaridad cobraba vida en cada sonrisa compartida y en cada gesto de apoyo.
Gracias a la maravillosa participación de todos ustedes, logramos recaudar fondos cruciales para nuestra fundación. Cada puja en la subasta no solo llevó consigo un artículo especial, sino también un paso más hacia la realización de sueños para niños y jóvenes con discapacidad.
Además de lo recaudado, celebramos la creación de nuevas conexiones positivas entre los asistentes. La energía solidaria en la sala fue contagiosa, y estamos emocionados de ver cómo estas conexiones se traducirán en futuros proyectos y colaboraciones.
Este evento no solo fue una cena benéfica; fue una expresión colectiva de compromiso y esperanza. Gracias por ser parte de esta mágica noche y por ser la chispa que impulsa nuestra misión.